Apertura al alza en Europa en una jornada sin referencias de interés y a la espera mañana del IPC americano y el viernes de los resultados de la banca de inversión en EEUU.

A destacar la falta de pistas sobre la evolución de la política monetaria de la Fed en las declaraciones de ayer de Jerome Powell, aun a pesar de la debilidad mostrada por algunos datos macro recientes y la moderación en las presiones inflacionistas, que se enfrentan al tono hawkish de los discursos recientes de varios miembros de la Fed, que apuntan a tipos largos por más tiempo.

A nivel macro, el Banco Mundial recortó sus previsiones de crecimiento, advirtiendo del riesgo de recesión en la economía mundial. Espera PIB global +1,7%e en 2023, -1,3pp vs lo previsto en jun-22, con EEUU +0,5% y Eurozona 0%. Para 2024, +2,7%e (-0,3pp). Estas cifras son más pesimistas que las ofrecidas por otros organismos. Los factores determinantes del recorte de previsiones de crecimiento son una inflación persistente y unos tipos de interés más altos. Este contexto, junto a un elevado endeudamiento, podría pesar sobre la inversión y provocar impagos de deuda corporativa. Recomendó asimismo que la política fiscal se centre exclusivamente en los colectivos vulnerables.