Si la semana pasada comparábamos una cadena minorista tradicional, la "retailer" Wal Mart, que por cierto recibió sus resultados trimestrales con una gran subida, con la tienda global on line ("e-tailer") por excelencia, Amazon, esta semana vamos a comparar también una compañía de "vieja economía", la emblemática General Electric (GE), con una de "nueva economía", Cisco Systems. Pero esta vez hablamos de compañías industriales y no del sector de la distribución.

GE celebraba el pasado lunes su "investor day" anunciando una gran reestructuración corporativa y una reducción de su dividendo a la mitad, lo que provocó una caída inmediata de sus acciones en la Bolsa de más del 7% en su peor sesión desde el año 2009. La compañía fundada por Thomas Edison, que llegó no solo a ser la más valiosa del mundo sino también la más admirada por su gestión en la época de Jack Welch, es la única de las que integraron el primer índice Dow Jones que permanece en el mismo, pero algunas apuestas estratégicas, como la venta de los negocios financieros o el no haber apostado lo suficiente por la energía solar y sí, sin embargo, por los combustibles fósiles, han llevado a un 2017 desastroso, en el que la compañía tuvo que anunciar en octubre de una caída del 75% en sus ingresos. La reacción de la Bolsa es muy visible en el gráfico que adjuntamos que muestra su espectacular caída.

Cisco Systems, el gigante de la redes, también llegó a ser la compañía más valiosa del mundo cuando en marzo de 2000 superó en valor bursátil nada más y nada menos que a Microsoft y capitalizó 569.000 millones de dólares, en plena burbuja tecnológica. Luego pinchó la burbuja y Cisco llegó a perder más de un 80% de su valor en unos años duros, pilotados por su legendario CEO John Chambers. Gracias a un estilo de gestión muy pegado a terreno, pero a la vez muy volcado en la innovación, Cisco ha resurgido de sus cenizas y hoy es una compañía sólida, que cotiza a un PER del entorno de 15 veces beneficios y que tiene un valor en Bolsa de 177.000 millones de dólares, tras haber presentado el pasado jueves unos magníficos resultados trimestrales y haber subido más del 5% a continuación. El Gráfico adjunto muestra muy bien el apoyo de la Bolsa a su gestión.

Seguimos apostando por Cisco, como ya lo hemos hecho en otras ocasiones (ver, entre otros, Gráfico semanal de 21 de agosto de 2017) y por el momento evitaríamos entrar en General Electric hasta que demuestre que ha vuelto a encontrar su camino.