Renta variable
La eurozona está en vías de recuperación, y la recesión ha quedado atrás. Existen datos clave importantes que lo avalan: la producción económica está mejorando mientras aumenta la confianza de los consumidores y, sobre todo, los índices de gestores de compras. Esto indica que pronto ocurrirá lo mismo con los beneficios de las empresas. Las posiciones de tesorería de las empresas de la eurozona son más elevadas que nunca. Sin embargo, los beneficios se mantienen en torno a un 40% por debajo de los máximos anteriores. La renta variable puede verse beneficiada, entre otras cosas, porque la mejora de los factores macroeconómicos coincide con una política monetaria laxa por parte del Banco Central Europeo. Y, además, su precio es
extremadamente atractivo: el PER ajustado cíclicamente, o PER de Shiller, está un 34% por debajo de la media histórica, mientras que el PER absoluto es del 10%. En comparación con Estados Unidos, los PER de la eurozona se sitúan en mínimos históricos. Las rentabilidades por dividendo en la eurozona, superiores al 3,3%, resultan muy atractivas en comparación con la renta fija. En la actualidad recomendamos sobreponderar los valores de la eurozona. Desde el punto de vista sectorial aconsejamos invertir en valores financieros,
empresas industriales y constructoras.
Economía europea
Las cifras de la balanza de pagos han mejorado considerablemente en la mayoría de los países del euro, mientras que disminuyen las restricciones al crecimiento económico provocadas por las medidas de austeridad. Cabe destacar especialmente el progreso realizado por España, que ha mejorado considerablemente su competitividad y ha reducido su déficit comercial, mientras que no deja de aumentar la inversión extranjera en el país. En general, la economía de la eurozona está mejorando.
Bancos centrales
El Banco Central Europeo ha anunciado que mantendrá durante un periodo de tiempo considerable su política de tipos bajos, lo que debería suponer un impulso de crecimiento adicional para las empresas, el consumo y las bolsas. De modo similar, la política de la Reserva Federal estadounidense sigue siendo positiva para los mercados de renta variable. En cuanto a la inflación, es previsible que se estabilice en su nivel actual del 1,6%.