Las acciones industriales sensibles al comercio internacional llevaron al Dow Jones a un récord al cierre de ayer jueves. El último de los principales índices de Wall Street pasa a recuperar terreno desde una corrección que comenzó en enero.

El mercado se tomó la actual disputa comercial con calma, y ​​se incrementó aún más cuando el índice del dólar cayó a su nivel más bajo en más de diez semanas. El S&P500 aterrizó en la parte superior de su canal de tendencia para romper su máximo anterior de 2.914 puntos y registrar un cierre en los 2.932,58.

El NASDAQ también ha estado a un paso de sus propios máximos históricos, operando a menos de 100 puntos de ese hito. Por su parte, el Dow Jones comenzó a unirse a la fiesta, cerrando por encima de los máximos históricos establecidos en enero de este año.

La tentación en esta situación es usar nuevos máximos como justificación para abreviar el mercado. Sin embargo, aunque los índices de EE.UU. están cotizando hacia la parte superior de sus rangos, la tendencia sigue siendo al alza, por lo que se debe tener precaución cuando se adopta una postura contraria.

Finaliza una semana volátil para la bolsa asiática

La última sesión asiática de la semana ha finalizado ya, poniendo fin a un período volátil para la región. El Nikkei se ha aferrado a sus fundamentos, aparentemente fuertes, y en el actual indicador de la confianza de los inversores, manteniendo el terreno ocupado durante la última quincena. El yuan chino se ha mantenido estable en su rango de 6,82 a 6,88. La recuperación de la renta variable china aún no se ha consolidado del todo, a pesar del repunte mundial, debido presumiblemente a las dudas sobre el crecimiento fundamental en China. Los principales índices, como el CSI300, siguen en una tendencia bajista de fondo por debajo de su directriz, a pesar del fuerte rebote desde mínimos. Aunque solo han pasado unos días, los mercados bursátiles chinos están mostrando niveles cada vez más fuertes, con lo que se augura (sobre todo para los alcistas) un desafío a la tendencia imperante en las próximas semanas.

Trump, la OPEP y el petróleo

La política del petróleo se ha disparado, reduciendo el precio del WTI y del BRent. Los precios del petróleo habían subido a lo largo de la semana, siguiendo noticias que respaldaban la opinión de que el precio del oro negro se movería más en el corto plazo. Durante varios días, esta dinámica ha persistido, empujando a Brent nuevamente hacia el muy significativo nivel de 80 dólares por barril.

La pregunta de los operadores era cuánto tiempo podría durar un desafío de este precio, antes de que el presidente Trump volviera a intervenir, ya que en el pasado arremetió contra la OPEP cuando los precios del petróleo alcanzaron estos niveles. El movimiento de Trump finalmente llegó ayer, en Twitter, con el presidente de los Estados Unidos tuiteando que "el monopolio de la OPEP debe bajar los precios ahora". Fiel a su forma, los precios del petróleo cayeron un 0,9% durante toda la sesión estadounidense.

¿Qué esperar de la semana que viene?

Los mercados financieros carecen de profundidad en términos de datos económicos fundamentales. El comercio estará dominado por la muy esperada reunión de la Reserva Federal de EE.UU., de la cual se espera que la Fed suba los tipos de interés en otros 25 puntos básicos. La reunión de la Fed se centrará en gran parte en la orientación brindada por el presidente Jerome Powell y su equipo. Mucha cautela ya que hoy vencen futuros y la siguiente semana en septiembre no suele ser estadísticamente buena para los mercados. Vamos a ver si este año tenemos una excepción.