Por primera vez desde que comenzara la crisis, España cumplió con el objetivo de déficit marcado por la Unión Europea: no es que estemos ante un hito inexplicable (pues en última instancia apenas redujimos el desequilibrio presupuestario en 65 centésimas), pero al menos sí honramos nuestro compromiso
Que España crece a unos ritmos intensos y esperanzadores es algo que nadie debería dudar a estas alturas. Tras dos años en los que nuestro PIB se ha expandido a ritmos superiores al 3%, 2017 sigue sin apuntar a un frenazo en seco de la actividad y, de hecho, el consenso actual ubica la previsión de crecimiento cerca de e