El pasado 2 de octubre les comenté por qué pensaba que las acciones de ArcelorMittal podrían seguir subiendo. Vamos a actualizar el escenario.

El 2 de octubre abrió la sesión en 21,90 euros y ha llegado a subir a los 25,45 euros, una subida de momento de +16,91% en sólo catorce sesiones bursátiles.

Y es que las razones que les expuse están haciendo su trabajo. Por un lado el hierro, que es clave en este sector, ya que si sube, las ganancias de las empresas se incrementan, de manera que los clientes no esperan para realizar sus pedidos de compra por temor a que más adelante les resulte más caro, así que adelantan enseguida sus encargos. Por otro lado el níquel, donde sucede algo parecido, pero no con tanta intensidad.

Les expuse también que había un tercer hecho que había que vigilar dado que la compañía tiene una fuerte exposición en Estados Unidos, y era la evolución del dólar. Una debilidad del billete verde le perjudicaría, una fortalece le beneficiaría. Este tercer elemento ha entrado también en juego, ya que los futuros de fondos federales reflejan un 91% de probabilidad de que la Reserva Federal suba los tipos de interés en su reunión del 13 de diciembre, hecho que favorecería al dólar.



En definitiva, y de momento, el escenario ha actuado perfectamente, aunque el objetivo de subida que les indiqué el 2 de octubre aún no se ha alcanzado, los 28-28,50 euros, sin descartar incluso los 30 euros. No se apreciaría síntoma de debilidad mientras logre permanecer por encima de los 21 euros. Si me lo permiten, me gustaría añadir que aunque ArcelorMittal lleva en lo que va de año una subida cercana al 20%, aún tiene potencial, que para conservadores lo situaría en los  27-27,30 euros, para los agresivos en 28-28,50 euros y para los muy agresivos en 30 euros.

En principio, espero que el escenario no se altere y siga beneficiándose de la mejoría de la economía de China (el producto interior bruto mostraba que el crecimiento se ralentizó ligeramente en línea con las estimaciones pero sigue bien, la economía creció un 6,8% con respecto al año anterior mostrando una sólida evolución y dentro del objetivo marcado por el gobierno de un crecimiento del 6,5% para este año. Además, también conocíamos los datos de las ventas minoristas que superaban las expectativas en un 0,1% y el índice de precios a la producción repuntaban por encima de lo esperado).

¿Y por qué tanta atención con China? Pues por su carácter comercial en materias primas, por ejemplo, las importaciones de hierro del gigante asiático subieron en septiembre a 102,8 millones de toneladas, frente a los 93 millones del mismo mes del año anterior, lo que supone todo un récord en este asunto y batiendo el anterior récord de finales de 2015 (de enero a septiembre del presente ejercicio, las importaciones se han incrementado un 7,1%).