Al cierre de la sesión del 28 de noviembre, ambos metales preciosos presentaban una situación similar, con la posibilidad de constituir el suelo del ciclo de 40 días en la jornada siguiente, donde estaban fijadas sendas vibraciones de Gann capaces de forzar un suelo. Dos días después se esperaba el suelo teórico (ST) en el oro; y tres días después, en la plata.
Por último, el oro disponía de línea horizontal situada en 1.207,60; por su parte, la plata contaba con la línea situada en 16,69. La rotura al alza de esas líneas activaría las señal de posible conclusión de la fase descendente del ciclo de 40 días de las dos materias primas.
Justo el 1 de diciembre, ambos metales preciosos emprendieron vigorosos rebotes que les permitieron romper al alza las referidas líneas horizontales, al tiempo que sus osciladores de confirmación certificaban la entrada oficial de sus ciclos de 40 días en la fase ascendente.
Tras unos días empelados en digerir el empacho alcista ejecutado el 1 de diciembre, ayer el oro y la plata reanudaron las alzas. Su situación actual la reflejan los siguientes gráficos.