"La eurozona puede caer en una nueva recesión a finales de 2019, escribe el ex director de investigación del BCE. Si bien es probable que sea menos severo que los de 2008 y 2011, "políticamente, la próxima recesión puede ser mucho más perjudicial para el proyecto europeo". Y yo añado ¿cuál es el principal problema que detectamos en nuestra gestora a nivel de la Eurozona? Italia es un gran problema, tanto por la dispersión política y el fanatismo populista como por el elevado nivel de deuda sobre el PIB y la debilidad de los balances de sus bancos. Una lacra que salpica a países europeos como Alemania, Francia y España. Los préstamos públicos —cerca de € 1,5bn— se concentran en los balances de los bancos de Roma y Milán. Pero los prestamistas en Frankfurt, París y Madrid tienen más de 425 mil millones de euros de deuda italiana....", me dice el analista jefe de un banco anglosajón.

Sobre las ramificaciones de la banca italiana:

"Del atasco hemos pasado a la involución en Europa. Una Europa con olor a rancio. Merkel y Macron dijeron hace meses, que refundarían Europa. Pero nada se ha hecho. Además, la señora Merkel se va de la política. Y lo que es peor, la geopolítca ha provocado un deterioro muy importante. Europa se ha olvidado de sí misma, como esas personas desaliñadas, que hace siglos que no se miran al espejo. Los mercados, también. Se envían propuestas a Bruselas sobre la refundación de Europa, pero son pobres, escasas de vigor..."

"El último pronunciamiento de los mandatarios alemán y francés respondió a la necesidad de avanzar en una política de seguridad común europea y en la preservación del multilateralismo, días después de que el presidente estadounidense, Donald Trump abandonara de forma unilateral el acuerdo nuclear alcanzado, de manera multilateral, con Irán ¿Recuerdan? Gestos a la galería y poco más. El tiempo corre en contra del fortalecimiento necesario de la Unión Europea..."

"La subida del precio del petróleo, las múltiples burbujas inmobiliarias, que afectan ya a varios países de la Eurozona, y las dudas sobre la fortaleza del crecimiento económico son malos compañeros de viaje. Los mandatarios europeos deberían saber que las fuerzas populistas siguen apostadas enfrente y que los líos político internos en todos los países del área (en todos) van a dar más disgustos que alegrías..."

"Complican las cosas, aún más, el olor político. Gobierno en España a su manera. Italia pisotea los papeles de las autoridades de Bruselas. Ángela Merkel pierde votantes por tos los landers y se va. Francia cambia de ministros y de ministras. Y el dinero sale corriendo de Europa. La refundación de Europa es inevitable..."

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