Euro Stoxx 50
Al borde del precipicio: así quedó el Eurostoxx al cierre de la jornada, amenazando seriamente la línea horizontal situada en 3.042,62. De romperse hoy esa línea, las tornas habrán cambiado de nuevo, inclinando la balanza a favor de que el techo del ciclo se haya formado justo en la resistencia temporal formada por la vibración de Gann que figuraba el 19 de noviembre y el TT que se cumplía ayer.

Ibex 35
Los cambios se precipitaron ayer en el índice español, que vivió una jornada de clímax bajista, según mi indicador de volumen. Una muestra de que los osos, después de hibernar durante varios días, volvieron con renovadas fuerzas.

En el informe de ayer, comentaba lo siguiente: ” (…) Ahora bien, la posición en que quedó ayer el precio es muy vulnerable. Ante cualquier nuevo latigazo bajista, la eliminación del soporte situado entre 9.715,57 y 9.594,05 es ahora una posibilidad cierta, en cuyo caso el Ibex debería acabar posándose en el siguiente objetivo de caída de la fase descendente, localizado entre 9.381,39 y 9.259,87″. Si bien el Ibex rompió al cierre de la sesión el soporte situado entre 9.715,57 y 9.594,05, no lo doy por finiquitado hasta que no vea al precio alejarse más de sus inmediaciones. Con todo, el movimiento de ayer sugiere que el Ibex acabará aterrizando en el objetivo localizado entre 9.381,39 y 9.259,87.

El único rayo de esperanza sigue procediendo del indicador de momento, que mantiene una potencial divergencia alcista con el precio.

Atendiendo ahora al pronóstico temporal, debo decir que ayer la onda sinusoidal terminó modificando su previsión sobre el ST, ajustándolo a la derecha. Así, ahora el ST se espera el 29 de noviembre. No obstante, antes de toparse con el ST, el precio deberá enfrentarse a la vibración de Gann que figura el 25 de noviembre, que tal vez sea capaz de forzar el suelo del ciclo por sí sola.

Entretanto, para activar una señal de la posible conclusión de la fase descendente del ciclo, el precio debe romper al alza la nueva línea horizontal situada en 9.751,70.

DAX
Es de justicia reconocer que la resistencia temporal que hacía acto de presencia esta semana ha logrado al menos detener la escalada del índice alemán. Lo mismo puede predicarse de la resistencia espacial comprendida entre 9.194,73 y 9.257,99, magistral en su contención del precio.

Por lo demás, aunque aparentemente anodina, la jornada de ayer nos deparó un cambio de fuste: el desplazamiento al alza de la línea horizontal. Así, para activar una señal de la posible conclusión de la fase ascendente del ciclo, el precio debe romper a la baja la nueva línea horizontal situada en 9.162,84.

Permanezcan atentos.