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¿A qué se debe el auge de los minicréditos rápidos?

La falta de crédito por parte de los bancos, sus pocos requisitos y la inmediatez son la clave del triunfo de los minicréditos rápidos online, sin embargo su coste es muy elevado y hay que tener mucho cuidado si se utilizan
por Dinero rápido online Hace 8 años
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Con la llegada de la crisis, los bancos y entidades financieras han restringido el acceso a los préstamos personales e hipotecas, elevando los requisitos para su concesión. No tener deudas pendientes y tener un trabajo estable son los mínimos indispensables para poder solicitar alguno de estos créditos. Algunos incluso realizan un análisis más personal y exhaustivo del cliente referente a bienes personales, familiares, movimientos bancarios, vida laboral, estudios, viajes realizados y un largo etcétera. Es decir, valoran muchos aspectos de la vida social y laboral para asegurar que el demandante tiene un entorno personal y económico estable. Aún así, su concesión no está asegurada.

A diferencia de los años de crecimiento, los préstamos personales ya no están al alcance de todos, conseguirlos se ha vuelto muy difícil. La recesión ha paralizado este tipo de producto financiero en los bancos, lo que ha dado pie al surgimiento de nuevas empresas financieras en las que se puede conseguir dinero rápido sin necesidad de realizar ningún trámite burocrático y con muy pocos requisitos, a cambio de un coste bastante superior.

ImagenLos minicréditos rápidos se suelen solicitar a través de Internet y se utilizan para obtener pequeñas cantidades de dinero en muy poco tiempo, habitualmente para atender alguna urgencia o pagar algún gasto imprevisto. La demanda ha provocado que la oferta sea cada vez mayor. Las entidades prestamistas proliferan y cada vez existe más para elegir. Su competencia es feroz, llegando a lanzar ofertas como el primer préstamo gratis. Hace poco incluso dieron el salto a la televisión, donde se pueden ver ya anuncions de algunas de las principales, como Vivus, Qué Bueno o Kredito24.

Las condiciones que se deben cumplir suelen variar dependiendo de la compañía pero siempre se necesita que el cliente sea titular de una cuenta bancaria, tenga teléfono móvil y conexión a Internet. Los requisitos para obtener esos minicréditos son tan pocos que incluso algunas entidades los conceden aunque el usuario no esté trabajando, es suficiente con cobrar una pensión o la prestación por desempleo. Además, algunas de ellas aceptan solicitudes a usuarios incluidos en registros de morosos como ASNEF o RAI.

Muchas incorporan también sistemas automáticos que evaluan las solicitudes las 24 horas del día, los 7 días a la semana. Los usuarios pueden pedir dinero en cualquier momento y obtener un respuesta en pocos minutos. Las transferencias, en caso de ser aprobadas las solicitudes, también se realizan de forma inmediata. Con todo esto, un préstamo solicitado entre semana puede resultar en que el cliente disponga del dinero en menos de una hora.

Todas estas virtudes hacen que los minicréditos rápidos online hayan subido como la espuma en los últimos años y cada vez más usuarios los soliciten. Sin embargo, esta forma de financiación a corto plazo no es tan bonita como parece. A cambio de las ventajas antes mencionadas, la contrapartida se encuentra en unos costes muy elevados que hacen que los usuarios deban pagar unas comisiones e intereses que rozan lo abusivo. Las entidades prestamistas deben cubrir el alto riesgo que asumen al pedir tan pocos requisitos, por lo que hinchan sus honorarios para que el negocio sea rentable aunque exista mucho impago.

La idea de un minipréstamo urgente que no exija papeleos ni avales es muy tentadora para los usuarios y, en ocasiones, puede resultar útil para afrontar situaciones de necesidad puntuales. Sin embargo, hay que ser muy consciente de lo que implica pedir uno de éstos minicréditos, no deben utilizarse de forma habitual y hay que asegurarse de que se podrá devolver a tiempo, para no incurrir en mayores gastos y evitar terminar inscrito en una lista de morosos.


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