A corto plazo la reunión del BCE del próximo jueves es clave y las Bolsa se mueven erráticas según la última noticia o rumor. A medio plazo si se confirma un programa de QE en la reunión del BCE, las Bolsas europeas, lideradas por las periféricas, podrían volver a máximos con rapidez. En caso contrario habrá un recorte que será una excelente oportunidad para comprar.

Las caídas de la primera quincena de agosto no han podido sacar los principales índices y blue chips de su tendencia alcista a largo plazo y el rebote técnico ha confirmado los soportes clave. El rebote se fundamente, básicamente, en que las Bolsas saben que tienen a los bancos centrales de su parte, y ya se sabe que el mejor amigo de una Bolsa es su banco central. También ayuda, y mucho, la interminable fortaleza de Wall Street, que ha vuelto a hacer nuevos máximos históricos, luchando con los míticos 2.000 puntos del S&P 500. Europa descuenta un QE del BCE y sube y empuja a Wall Street, que hace nuevos máximos históricos, lo que a su vez, retroalimenta subidas en Europa. A medio plazo Wall Street es la principal amenaza por la posibilidad de un crack en septiembre u octubre. Septiembre y octubre son los meses de los grandes cracks, pero también son los meses de los grandes suelos de mercado.

El Ibex 35 ha rebotado en el suelo de su canal alcista, ha superado la media móvil de las últimas 200 sesiones y se ha frenado en la directriz bajista. Un poco más arriba, en los 11.000 puntos, hay una resistencia todavía más importante. Los recortes ya son una oportunidad para tomar posiciones.