A corto plazo el ruido se impone a la tendencia: la segunda quincena de junio tiene demasiadas incertidumbres. A medio plazo hay que esperar, pues si las citas claves de la segunda quincena salen mal, las consecuencias serán muy malas.

La semana que viene empieza una quincena plena de citas clave: el miércoles, día 15, reunión de la Fed, que pierde importancia, pues prácticamente no hay posibilidades de subidas de tipos en esta reunión, e incluso ni en la de julio, según los últimos datos macro que se van conociendo. Luego, la siguiente semana, el jueves de, día 23, se celebra el referéndum sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea, que al contrario de la reunión de la Fed, gana relevancia pues el Brexit aumenta su ventaja en las encuestas. Pero una cosa son las encuestas, en las que la gente dice lo que quiere, y otra las apuestas donde se juega su dinero. Así, la firma de apuestas Betfair, otorga una probabilidad del 78% a que el Reino Unido permanezca en la Unión Europea. Y por último, y no menos importante, al menos en España, el domingo, día 26, votaciones para las elecciones generales. Y eso sin olvidar, a más largo plazo, todo el proceso electoral en USA con Donald Trump de protagonista. Es lógico, que en esta situación los mercados no toman partido, e incluso las manos fuertes se mantengan neutrales y prácticamente inactivas, realizando solo operaciones a muy corto plazo.

El Ibex 35 intenta no perder el suelo del triángulo, pero cada vez le cuesta más y el escenario más probable sigue siendo la salida lateral-bajista, con un primer soporte en los alrededores de los 8.600 puntos, sus mínimos de mayo.